La Real Sociedad Geográfica, en el Día Internacional de la Mujer, quiere rendir homenaje a Adela Gil Crespo (1916-1992) reconociendo su actividad como geógrafa, como miembro de la Real Sociedad Geográfica desde 1954 y como vocal activa y cualificada de su Junta Directiva.
Adela Gil Crespo fue una mujer valiente, con una vida apasionante. Una geógrafa desconocida para la mayoría de las generaciones de geógrafos actuales, a la que algunos de sus coetáneos trataron de ignorar, por muy diversos motivos, nunca explicitados pero fácilmente deducibles. Pero ella fue una mujer fuerte, trabajadora, enamorada de su vocación de geógrafa y de profesora. En palabras de su biógrafa, Margarita Ibáñez Tarín: Era una mujer adelantada a su tiempo: agnóstica, madre soltera, trabajadora, rebelde con las trabas y las coerciones sociales, una luchadora en tiempos difíciles, que sobrevivió a la dictadura y murió en 1992.
Pero, al margen de su perfil personal, la Real Sociedad Geográfica quiere resaltar ahora su faceta científica y profesional, como profesora e investigadora en la disciplina geográfica. Se formó en el Instituto Escuela de Madrid, institución que llevó a la práctica el modelo educativo de la Institución Libre de Enseñanza, fundada por Giner de los Ríos en 1876, el mismo año, como es sabido, que nuestra Real Sociedad Geográfica. Dicho modelo se basaba en la gran importancia que tenía el aprendizaje activo, con numerosas clases prácticas, laboratorios y excursiones, y en el trabajo personal, en constante comunicación entre profesor y alumno. Todo ello con el objetivo de conseguir una formación integral del alumno y, a la vez, una preparación permanente del profesor. De esta forma, lo que Adela Gil aprendió en su etapa de alumna y más tarde durante su formación universitaria y en las instituciones nacionales y extranjeras a las que acudió, lo convirtió en su modelo de enseñanza para transmitir sus conocimientos a muchas generaciones de alumnos.
Tras diversos avatares personales y profesionales, en los años más difíciles de nuestra historia, Adela Gil obtuvo en 1945 la Cátedra de Geografía e Historia de Instituto, siendo destinada al de Requena, donde aún sigue presente su recuerdo. Tras ocupar plaza en Institutos de Ávila, Zamora y el Beatriz Galindo de Madrid, terminó su vida docente en la sección delegada “Santamarca”, del también madrileño Instituto Ramiro de Maeztu, que sustituyó al Instituto Escuela de Hipódromo en la que se había formado muchos años antes y que en cierto modo seguía el mismo modelo educativo. De forma que su vida como docente empezó y terminó en el mismo espacio y con similares presupuestos, incorporando a su quehacer esa una nueva “forma de enseñar” que colocaba a los alumnos ante a los hechos geográficos por medio de excursiones, trabajos de campo, cuadernos de prácticas, etcétera.
Pero además de una excelente profesora, tanto en el aula como en el campo, Adela Gil publicó numerosos artículos de investigación, escritos de divulgación científica, crónicas, reseñas, etc. es decir cualquier tipo de trabajos propios de su profesión. La mayoría de estos vieron la luz en nuestro Boletín, pero también en otras revistas geográficas de nuestro país. También publicó varios libros dedicados a la Didáctica y Metodología de la Geografía y fue cronista de esta Real Sociedad Geográfica en todos sus viajes realizados por varias partes del mundo.
Su primera colaboración en el Boletín de la Real Sociedad Geográfica fue en 1949 (vol. LXXXV, pag.671), con una breve reseña bibliográfica, y se mantuvo con bastante frecuencia hasta 1991, un año antes de su muerte, cuando publicó su última reseña sobre el libro “Viaje en el Transiberiano” de C. Vilá Vinyeta (vol. CXXVI-CXXVII, pag. 346). Entre ambas fechas sus publicaciones fueron frecuentes y variadas: de investigaciones, viajes, congresos internacionales, etc., siempre con temas de máxima actualidad, no solo en el momento de su publicación, sino también alguno de ellos de máximo interés hoy día.
Un ejemplo fue su participación en la sesión monográfica sobre la enseñanza de la Geografía organizada por esta Real Sociedad en 1981, en la que tuvo un papel predominante. En las conclusiones de dicha sesión, que corrieron a su cargo, Adela Gil decía: la finalidad [de estas sesiones] es llegar a conocer dada la problemática de la enseñanza de la última década, cómo está representada esta disciplina en los planes de estudio de EGB, BUP, Escuelas Universitarias y qué criterios se siguen en la Universidad con vistas a la formación científica y didáctica de los profesores que han de impartir esta materia en los niveles citados. Han pasado cuarenta años y el problema de la enseñanza de la Geografía en todos los niveles educativos sigue sin resolverse satisfactoriamente y las palabras de la profra. Gil Crespo de aquel entonces siguen teniendo validez total hoy día.
Por último, como una muestra más de su actividad investigadora, como pionera de los estudios geográficos sobre vulcanismo, queremos compartir y divulgar la conferencia que impartió, en 1956, en nuestra sociedad sobre “Paisajes volcánicos de la Italia Meridional”, fruto de una beca que obtuvo para estudiar vulcanismo en la Italia del Sur durante el verano de 1956.
Paisajes volcánicos de la Italia Meridional
Para la realización de esta breve semblanza, se han consultado las siguientes referencias:
IBÁÑEZ TARIN, M (2013): «La represión política en el Instituto de Requena al término de la Guerra Civil. Represaliados e integrados en el nuevo Estado» en Saitabi, Revista de la Facultat de Geografia i Història, 62-63, 2012-2013. pp.135-158.
Foto: http://www.requena.es/es/report/adela-gil-crespo-aula-cultura-feliciano-yeves